El origen del dÃa de la Madre
La celebración del dÃa de la Madre tiene sus orÃgenes en la antigua Grecia, donde se rendÃa culto a Rea, madre de los dioses. En México, esta fecha se oficializó en 1922 gracias a la iniciativa del periódico Excélsior y la SecretarÃa de Educación Pública, convirtiéndose desde entonces en una de las fechas más entrañables del calendario. En el Colegio del Tepeyac, el dÃa de las Madres se ha celebrado a lo largo de las décadas con distintas actividades llenas de gratitud, música, detalles y emociones que buscan reconocer el corazón y la fuerza de las mamás que forman parte de nuestra comunidad.
Las Mamás, un pilar del Tepeyac desde hace 85 años
Las madres del Colegio del Tepeyac han sido un pilar fundamental en la formación de generaciones de hombres y mujeres de bien. A través del amor, y el acompañamiento de cada una de ellas, se ha creado la historia de miles de alumnos que han dejado huella dentro y fuera de nuestro Colegio.
En el marco del DÃa de la Madre, el Colegio del Tepeyac honra y agradece profundamente su labor.
DÃa de la madre 1966
Una presencia constante en la vida escolar
A lo largo de nuestras generaciones, las mamás han sido las primeras guÃas y testigos del camino educativo de sus hijos, acompañándolos en sus triunfos, y aprendizajes. Siempre presentes en cada evento institucional, en cada Preposada, en cada edición de TEXPO, alentando desde la tribuna en los partidos de los Frailes, apoyando a sus hijos en las actividades del CIFAT, aplaudiendo con orgullo las presentaciones del Son del Tepeyac y estando ahÃ, firmes y amorosas, en cada paso del camino. Su presencia ha fortalecido no solo a sus hijos, sino también a nuestra institución. Por eso, también queremos recordar que el Colegio del Tepeyac, en su esencia, también es una «alma máter»: una madre nutricia que ha acogido, guiado y educado a miles de estudiantes con el mismo amor, constancia y firmeza que una madre brinda a sus hijos.
«Una madre no es solo quien da la vida, sino quien la nutre cada dÃa con amor, fe y esperanza.»
Con esta frase, queremos rendir homenaje a todas las mamás que han confiado en el Colegio del Tepeyac para formar a sus hijos. Gracias por enseñar con el corazón y guiar con sabidurÃa.
Desde el Colegio del Tepeyac, reconocemos que el amor y el agradecimiento hacia una madre no debe limitarse al 10 de mayo. Cada dÃa es una nueva oportunidad para expresar gratitud, compartir un abrazo, dedicar tiempo y decir «gracias, mamá». Porque su labor merece ser celebrada siempre.
¡Feliz DÃa de las Madres! A todas las mamás de nuestra comunidad Tepeyac: gracias por ser el alma que inspira y la fuerza que sostiene.