La mercadotecnia no siempre fue como la conocemos hoy. Antes de los influencers, los anuncios personalizados y las campañas en redes sociales, las marcas tenían que ingeniárselas con medios tradicionales y muy poca interacción directa con el consumidor. En este blog te llevamos a un breve pero revelador recorrido por el pasado de la mercadotecnia, para entender cómo se transformó de una estrategia centrada en el producto a una disciplina enfocada en las personas.
Marketing en blanco y negro: Enfocados en el producto
Durante gran parte del siglo XX, las empresas estaban más preocupadas por producir en masa y a bajo costo que por conocer a sus consumidores. La publicidad se realizaba en periódicos, revistas y carteles, y su objetivo principal era informar sobre las características del producto. Poco o nada se hablaba de emociones, experiencias o necesidades del cliente.
Este modelo era totalmente unidireccional: las marcas hablaban, los consumidores escuchaban. Y eso bastaba para vender.
De los jingles a los íconos publicitarios
Entre las décadas de 1950 y 1980, la televisión y la radio marcaron un antes y un después. Las marcas comenzaron a utilizar jingles, eslóganes pegajosos y personajes icónicos que se quedaron en la memoria colectiva.
Era el tiempo en que la mercadotecnia se volvió más creativa y persuasiva, pero aún se mantenía el enfoque de “uno a muchos”: el mensaje seguía siendo dirigido sin esperar una respuesta directa del público.
Hacia finales del siglo XX, las cosas comenzaron a cambiar. Con el surgimiento de nuevas herramientas de análisis y comunicación, las empresas empezaron a investigar al consumidor, segmentar mercados y crear campañas más dirigidas.
Nacieron conceptos como el marketing relacional, el branding emocional y estrategias de fidelización como las tarjetas de cliente frecuente. Por primera vez, las marcas comenzaban a escuchar a su audiencia y adaptar su mensaje según sus intereses y comportamientos.
¿Qué nos enseña la mercadotecnia del pasado?
Entender cómo ha evolucionado la mercadotecnia es clave para valorar el contexto actual. Hoy vivimos en un mundo digital donde el marketing es interactivo, personalizado y basado en datos. Pero conocer sus raíces nos ayuda a comprender la lógica de muchas estrategias y a evitar errores del pasado.
La gran lección es clara: el cliente siempre ha sido importante, pero hoy más que nunca, está al centro de todas las decisiones
Estudia Mercadotecnia en la Universidad del Tepeyac
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